El pasado 1 de marzo se han cumplido doscientos años del nacimiento de Frederic Chopin.
Nació en la localidad de Zelazowa Zola, cerca de Varsovia (Polonia), de padre francés y madre polaca.
La vida y obra de Chopin está ineludiblemente unida al piano, instrumento que tocaba desde pequeño, desarrollando un virtuosismo excepcional.
Sus obras gozan -como no puede ser de otra manera- del reconocimiento universal por su exquisita sensibilidad por haber y saber expresar, a través de la música, toda una gama de sentimientos y evocaciones.
Es una gran suerte que personas como Frederic Chopin hayan dejado una obra musical tan sublime.